Arturo Ulloa

La aparición e introducción de las resinas compuestas dentro de la odontología restauradora, ha sido una de las contribuciones más significativas para la odontología en los últimos veinte años, ofreciéndonos ventajas que incluyen conservación de tejido dental sano, reducción de la microfiltración, prevención de la sensibilidad postoperatoria, refuerzo de la estructura dental y la transmisión de las fuerzas masticatorias. En la  actualidad se han realizado mejoras  en las formulación de sus componentes, el desarrollo de nuevas técnicas de colocación y la optimización de sus propiedades físicas y mecánicas contribuyeron a la mejora de este material, ejemplo  de esto, es el desarrollo de las resinas fluidas o de baja viscosidad, que día tras día son más populares, además de incrementar sus indicaciones debido a sus propiedades. Una de estas indicaciones son las restauraciones, en cavidades clase V, donde hay mucha dificultad en obtener un óptimo sellado marginal de la restauración, debido a la gran microfiltración a ese nivel.  Aunque este tipo de resinas posee una alta contracción de polimerización 4 a 7 % (factor que influye en la microfiltración), su gran elasticidad es un factor que contrarresta el esfuerzo interfacial. Con estas ventajas y desventajas  que ofrecen tanto las resinas convencionales de moderada viscosidad y las resinas de baja viscosidad, nace el interés en realizar un trabajo de investigación que nos permita determinar  la influencia de la viscosidad  en la microfiltración de las restauraciones clase V con resina compuesta. La obtención de estos resultados juega un papel importante ya que nos ayudará a entender mejor el comportamiento de las resinas compuestas con respecto a su viscosidad y su uso correcto en las cavidades clase V.