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Prensa Libre

13/06/12 - 00:00 Economía

Vicente Cerna

Vicente Cerna fue presidente de la República de Guatemala del 24 de mayo de 1865 al 29 de junio de 1871. Fue comandante en jefe de las Fuerzas Armadas del Estado de Guatemala.

Designado por Carrera como su sucesor, la Asamblea Legislativa lo eligió para el cargo por cuatro años. Sin embargo, decidió reelegirse, y ese fue el motivo principal para el descontento político, el levantamiento en oriente —que fracasó—, y la Revolución Liberal, que lo derrotó y retiró del cargo. Fue el fin del “Régimen de los 30 años” —conservador—, que se inició en 1838 cuando Rafael Carrera toma la plaza de Guatemala a la caída de Mariano Gálvez, y termina con la Revolución Liberal. Se da inicio al “Régimen de los 43 años” —liberal—, que partiendo de 1871 termina en 1944 con la Revolución de Octubre.

Cerna continuó con el sistema político conservador y mantuvo en el cargo a los mismos funcionarios de Carrera. Continuó con la construcción del Puerto San José, el cual fue inaugurado en 1870. Introdujo el telégrafo, cuya primera línea se instaló en 1869 entre Amatitlán y la Ciudad de Guatemala.

Decretó el 9 de junio de 1869 la aplicación del sistema métrico decimal. Con la ley del 21 de septiembre de 1870, se aprobó una reforma monetaria aplicando ese nuevo sistema. Con esa misma ley se creó una nueva moneda de bronce de un centavo, la primera que tuvo circulación oficial en Guatemala de esa denominación. En lo que se refiere a la moneda, la población no recibió con agrado esa disposición. El Peso anteriormente estaba dividido en 8 reales o 32 cuartillos, y el cambio hacía que el peso fuera dividido en cien centavos —algo normal hoy—, lo cual no fue de aceptación general. De hecho, una de las proclamas de la Revolución Liberal era eliminar la aplicación del sistema métrico decimal.

El añil ya había decaído en su producción, y la grana, su sustituto, presentaba problemas de mercadeo y precio. Aun cuando desde la época de Carrera se había iniciado el cultivo del café, este no se había desarrollado porque requería afectar las tierras ejidales de los indígenas, y de la Iglesia Católica, y requería sistema de vías de comunicación, puertos, créditos hipotecarios; lo necesario para abrirse al exterior en forma masiva. Con Cerna se redujo la política protectora de Carrera a favor de los indígenas.

En la ciudad capital se avanzaba en la construcción del viejo Mercado Central, al lado poniente de la Catedral Metropolitana, calle de por medio —que se destruyó en el terremoto de 1976— y que además de servir como lugar de abastecimiento por más de un siglo, sirvió como cuartel, caballeriza y hospedaje de las tropas y sus cabalgaduras que llegaron con la Revolución Liberal del 30 de junio de 1871.

En las elecciones de 1869, compitió con Cerna el también mariscal de campo José Víctor Zavala, por el Partido Liberal. De haber ganado Zavala, posiblemente hubiera sido innecesaria la Revolución Liberal. Los liberales se encendieron en patrio ardimiento por el resultado negativo para ellos en la elección, y promovieron la desestabilización del régimen, a través de un antiguo caudillo montañés, Serapio Cruz —conocido como tata Lapo—. Este, amigo y cuñado de Carrera, participó en la campaña contra El Salvador en 1863. Para combatir a Cruz, el Gobierno nombró al general Antonino Solares —conocido como tata Tonino—. Ambos militares eran aguerridos. Solares venció a Cruz en Palencia el 23 de enero de 1870, y ocurrió un suceso lamentable: le cortaron la cabeza a Cruz para llevarla a la capital. Eso avivó el fuego liberal.

En 1866 se creó la Compañía General de Aguardientes de Guatemala, para asegurar los impuestos por este motivo. Se recurrió a préstamos y anticipos de los comerciantes o titulares de concesiones, para descontarlos luego de los derechos tributarios tanto por la importación de mercaderías como por la concesión de monopolios en los licores.

Las campañas militares agotaron los recursos financieros del Estado. Debido a ello, se originó un déficit presupuestario. En 1869, se obtuvo un préstamo por medio millón de libras esterlinas, en condiciones onerosas y que con el correr del tiempo se unió a la Deuda Inglesa aprobada en 1824 y ejecutada en 1825, con aprobación de la Asamblea Nacional Constituyente de la Federación de Centroamérica. En resumen, el Gobierno vivía de los impuestos al comercio exterior a través de la alcabala marítima, y los ingresos de los monopolios.

JOSé MOLINA CALDERóN / Economía para todos

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